​Los colores de la bandera del Colegio Teresiano abrazan desde la tierra (café) al cielo (azul) como símbolo de una Espiritualidad que se encarna en las culturas donde trabaja, se inserta en el momento histórico del país, dialoga con los valores propios de cada etnia para enriquecerse y enriquecer. La disposición de los colores tiene su sentido.

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• El azul representa la sed de Dios del ser humano: hombre-mujer. El estudiante necesita entrar en contacto con este Dios que es el único capaz de colmar la sed del corazón humano y trascender todas sus crisis de sentido.

• El blanco une el azul y el café, simbolizando la oración como relación personal con Dios y como síntesis del humanismo Teresiano, que siembra en sus estudiantes: Fortaleza, grandeza de ánimo, alegría, gratitud, generosidad, sinceridad, lealtad y sencillez, para la aceptación del riesgo, la magnanimidad (altos ideales y amplitud de miras) el compromiso en la entrega y el propósito de la búsqueda del bien y la verdad. Proyectan a la persona al entusiasmo y la responsabilidad a vivir desde su centro interior de donde sale toda su fuerza que lo llena de vigor, ilusión, tenacidad audacia, superando el egoísmo.

• El café simboliza la tierra o el suelo donde se siembra la semilla de la Espiritualidad Teresiana. Explica nuestro deseo de educar en la vida y desde la vida, de cara a su contexto histórico y social donde ha de insertarse gradualmente incidiendo en él desde lo que ha recibido a lo largo de toda su vida.